El pasado jueves Howlin’ Jaws se presentaban en el Nave 9 bilbaíno para dar rienda suelta a su pasión por el sonido del rockanroll más primigenio y para presentar “Burning House”, su última galleta digital. Y estos parisinos lo tienen pese a su juventud. En formato trío y ante una sala mediada en su entrada descargaron rockanroll primitivo tamizado por sus distintas influencias. La anterior vez que estuvieron por aquí me los perdí. Todo el mundo hablaba de una banda que reconducía el rockabilly y trasegaba con ritmos trotones. Con esos mimbres me acerqué al Nave 9 para comprobar que no habían perdido ese sustrato y me cerciore de que lo habían ampliado con lecturas de los temas que se acercaban más al beat y ritmanblús británicos y con un poso Kinks muy acentuado (o eso me pareció a mí por lo menos). Variedad en una propuesta que caló entre el respetable en un bolo que fue de menos a más y terminó envuelto en una vorágine de ritmo y electricidad.
Durante hora y cuarto, poco más o menos, Howlin’ Jaws deambularon por territorios conocidos, principiando con tonos fronterizos, para dar rienda suelta después a los ritmos más trotones y ritmos sincopados. Presentaron unos cuantos temas por primera vez en directo y no se anduvieron con chiquitas con las versiones. La vena Kinks me siguió retumbando durante toda la primera mitad de show y fue a partir de ahí cuando desparramaron más en el rockabilly y en los sonidos surf (“King Of The Surf”) con la guitarra sacando chispas a los riffs y deambulando ya entre el respetable en solos incandescentes. “Strange Effect” sonó a balada engominada y con “Comin’ Home” se salieron de la tabla, ahora sí con el bajo y la batería por la labor del espectáculo. De ahí al final, paroxismo eléctrico y versiones atinadas en los dos bises que concedieron (dudo ahora si fueron tres). Por allí paseó el espíritu de Slim Harpo (“Shake your Hips”) encadenado al “I Feel So Good (I Wanna Boogie)” que el grandioso Magic Sam llevo al olimpo del blues y que recrearon con criterio y el guitarra desatado. Más bises y más versiones (de Ike Turner) finiquitaron un concierto con lustre y que nos dejó satisfechos.
Lugar: Nave 9 (Bilbao)
Fecha del Evento: 1 de marzo de 2018
Texto y fotografías: Lorenzo Pascual
