Ya por fin llego el día, uno de los mejores baterías que ha dado la música va actuar en la sala BBK, no es otro que, GINGER BAKER, que viene acompañado de su banda Jazz confusion. La visita estaba programada para el día 4 de diciembre del año anterior, pero se tuvo que aplazar por problemas de salud de Ginger, como confirmaron fuentes cercanas al artista.
La espera ha merecido la pena, han sido casi dos meses que han pasado rápido desde que se cancelara su anterior fecha. La verdad fue todo un privilegio para mí poder tener frente de mí a uno de los mejores baterías de todos los tiempos, no es algo que ocurra muy a menudo poder ver a una de esas personas que ha dejado una gran huella en la música y gracias a la programación de Music Legends programado por la sala BBK tuvimos la fortuna de disfrutar de su buen hacer.
Ginger fue, es y será una leyenda del Rock, puede que mucha gente no lo piense, pero cada uno es libre de tener su opinión, aunque el mismo reniega de esa etiqueta pero sus trabajos en grupos tan importantes como Cream, Blind Faith, Hawkwind, Masters Of Reality o junto al gran Fela Kuti, y tantos otros… hace de él una leyenda que ha servido de inspiración a mucha gente. Él siempre ha dicho que nunca se vio a sí mismo como músico de Rock, sino como baterista de Jazz, aunque el que tiene un “don” es bueno tocando cualquier estilo de música.
Pasadas las 20:00 h. salían al escenario de la sala BBK, el cuarteto formado por el maestro Ginger y sus acompañantes habituales, Pee Wee Ellis (saxofonista), Alec Dankworth (bajista) y el gran Abass Dodoo(percusión africana).
Desde el primer momento sabíamos que íbamos a disfrutar de un concierto totalmente instrumental de música Jazz con toques Africanos. Después de una intro espectacular, Ginger se acercó el micrófono y se dirigió a nosotros con una voz un profunda, pausada y debilitada a causa de la edad, que hubo momentos que no se entendía muy bien, pero con su espectacular sentido de humor nos presento a sus tres magníficos acompañantes.
Vimos a un Ginger muy activo con ganas de agradar a todos los presente, con mucha vitalidad, aunque poco a poco esa vitalidad se iba apagando, pero gracias al buen hacer de Pee al saxofón que estuvo brillante durante todo el concierto, a Alec que brillo tanto con la guitarra como con el contrabajo y que decir del gran Abass que aparte de ser un magnifico percusionista estuvo interactuando con el público y pidiendo ovaciones para el gran batería, no se notó mucho esa falta de vitalidad.
Mientras trascurría el concierto se notaba el cansancio de Ginger tanto al hablar como al tocar, por eso, al cabo de unos 40 minutos se realizó un descanso para que Ginger y los suyos recargaran pilas, porque ya comento que es un hombre mayor y tiene que coger energías para seguir dando a la batería.
Tras pasar unos minutos el cuarteto volvía al escenario de la sala BBK entre una gran ovación. Volvieron con más fuerza y pudimos disfrutar de un recital de virtuoso, con clase y de categoría digno de admirar, aunque transcurriendo las canciones Ginger daba signos de flaqueza y fatiga, pero siguió como gran profesional que es tocando como él sabe hacer y también tuvo tiempo para contar alguna anécdota de su viaje a África. Antes de terminar se dirigió al público diciendo que le vamos a matar, señal de que el concierto estaba a punto de terminar.
Nos regalaron un bis, en el que se subió al principio solo Abass al escenario y pidió al público que participaran al ritmo que ponía con la percusión, respondimos con vítores y siguiendo todo lo que nos pedía, fue una de las partes más divertidas del concierto. Ya después de esto volvieron el resto de componentes con Ginger a la cabeza para tocarnos una canción más y despedirse como mejor saben, con la música.
Lugar: Sala BBK (Bilbao)
Fecha del evento: 30 de enero de 2014
Texto y Fotografías: David Mars
