Salgo del metro, me dirijo a la Sala Bikini de Barcelona. Hoy tengo una gran cita con dos grandes bandas, Miss Caffeina y la banda escocesa de Glasvegas. Otra noche fría la del pasado martes tres de diciembre. Afortunadamente, el grupo empieza su actuación con unos minutos de retraso. El tiempo justo que necesito para quitarme el abrigo y el jersey. La noche se presenta animada.
Empieza a sonar el principio de Tormento, sale al escenario Miss Caffeina, grupo caracterizado por su trayectoria pop independiente. Siguen con el tema “disfraces” donde vemos a Alberto, el cantante, con ojos pintados y tocando con una pandereta. Nos piden que nos acerquemos más al escenario para tocar el tema “gigantes”. Aquí el grupo sufre algunos problemas de sonido, pero los solventan sin dejar de sonar. Llega el nuevo single “venimos”, el grupo se muestra sonriente en todo momento. Mediante el cambio de luces rojas a azules, escuchamos “modo avión”, a petición de una de las asistentes. A ritmo de palmas escuchamos “MM”. Alberto nos deja ver su tatuaje de águila en uno de sus antebrazos. Terminan con “Hielo”, así con su presentación de su último disco autoeditado De polvo y flores.
Tras media hora de cambio de instrumentos, en la que la sala se llena al completo, escuchamos una marcha ceremoniosa y hacen su aparición Glasvegas. La banda escocesa anima al público, y abren el concierto con Later… When the TV turns to Static, tema que da nombre a su nuevo álbum. Observamos a Jonna (la batería) tocando con mucha fuerza de pie, portando unas gafas de sol negras y unas plumas como pendientes. La segunda canción elegida es Youngblood, donde nos envuelven en una espiral de luces rojas. Empieza a llover en la pantalla instalada al fondo del escenario, y con ello suena It’s my own cheating heart that makes me cry. Es una canción muy melódica, y los de Glasgow aunque cuenten con una estética muy rockera, la interpretan sintiéndola desde dentro. Eso el público lo nota, y lo agradece con una gran aplauso y aullidos. Allan (el cantante) nos grita “¡Vamos!” levantando el puño, y es que el concierto no ha hecho más que empezar. Con Euphoria, take my hand, los asistentes saltamos hasta que es Allan el que nos aplaude a nosotros. I feel wrong viene marcada por las baquetas de Jonna, y con Allan haciendo sonar la guitarra de espaldas al público hasta que empieza a cantar. A continuación de If, le sigue Secret truth acompañada de imágenes de flores creciendo a un ritmo vertiginoso, al igual que Glasvegas desprende una energía increíble. Rab (guitarrista) acerca su instrumento a los amplificadores, y Paul (bajo) da cabezazos en el aire. Con The world is yours, Allan demuestra la gran voz que tiene. Con Dream dream dreaming es el público el que demuestra sus dotes de corista. Tocan Geraldine, y nos agradecen nuestra asistencia, además de chocar unas cuantas manos de asistentes. Glasvegas lo está pasando bien, y nosotros también. Allan anuncia que la siguiente en sonar es Ice cream van, y el público enloquece y empieza a saltar. Terminan con Go square go donde el cantante es el único que la interpreta, mientras los otros componentes se mantienes erguidos mirando al frente. Hasta el apoteósico final, donde empiezan a tocar todos desenfrenadamente, acompañados de un juego de luces que roza casi la locura.
El público no quiere marchar aún, y pedimos que vuelvan a salir. Aparece Allan, que ha estado muy en contacto con los asistentes durante todo el espectáculo, y nos explica que su español es muy limitado. Solo conoce cuatro palabras: “ Qué, sí, vale y salut”. De las risas pasamos al silencio absoluto para escuchar al cantante, en solitario, entonando Be my baby. Para acompañar a Allan interpretando I’d rather be dead, Jonna, Rab y Paul cambian sus instrumentos habituales por teclados. Todos vuelven a sus puestos para seguir con Daddy’s gone, una de las preferidas del público, y así lo transmiten coreando y moviendo los brazos al son de la música. Lots sometimes sirve para despedir el concierto. Empiezan con un ritmo muy lento, y cada vez se va acelerando más y más hasta perder el control. Jonna sacude las baquetas descontroladamente, Rab y Paul se superponen, y Allan aúlla sin parar. Final por todo lo alto. Abandonan el escenario dando la mano a algunos asistentes, y firmando discos. Ellos están agradecidos por nuestra asistencia, y nosotros a ellos por su gran espectáculo.
Lugar: Sala bikini (Barcelona)
Fecha del evento: 03 de diciembre de 2013
Texto: joanna
