El sábado comenzamos con el concierto de Los Ibéricos a mediodía, cuando el calor ya apretaba. Este grupo zaragozano se empezó a fraguar en los años 60 con unas cuidadas versiones de la mejor música instrumental de la época. Y fue precisamente con tres temas instrumentales con los que abrieron el recital, como ‘Apache’ de The Shadows o ‘Walk, Don’t Run’ de The Ventures. Acto seguido subió el cantante al escenario para ofrecernos con mucho humor un buen repertorio de temas tan clásicos como ‘C’mon Everybody’ de Eddie Cochran, algunos temas de la Creedence (‘Lodi’, ‘Have You Ever Seen The Rain’, ‘Bad Moon Rising’, ‘Who’ll Stop The Rain’ o ‘Proud Mary’), la versión que hicieron Los Mustang del clásico ‘San Francisco’ de Scott McKenzie, ‘Johhny B. Goode’ de Chuck Berry en castellano, un ‘What a Wonderful World’ de Louis Armstrong muy al estilo Ramones, el ‘Old Time Rock And Roll’ de Bob Seger en castellano o ‘Pretty Woman’ de Roy Orbison, finalizando con ‘Nights in White Satin’ de The Moody Blues que ofrecieron como bis a un público que demandaba más canciones. Personalmente, el concierto más emotivo del festival, con unos simpatiquísimos artistas que nos hicieron pasar un rato muy divertido recordando esos temas tan míticos que han marcado buena parte de nuestras vidas.
Había el viento suficiente para cancelar el Globo Aerostático que estaba previsto, desde el que Rube iba a actuar. Una lástima, ya que se había convertido es una de las actividades más esperadas de esta edición.
No continuamos con los conciertos hasta la actuación de Los Retrovisores, que vinieron desde Barcelona para ofrecer un espectáculo muy particular y original de Iberic Soul, Freak Beat y Pop muy sesenteros, con nueve músicos sobre el escenario que interpretaron temas como ‘Mentiras’, ‘Calamity Jane’ o ‘Me Olvidé De Ti’. Consiguieron trasladarnos a aquella época con una banda muy solvente y una sección de vientos destacable, pero si bien su música sonó espectacular no puedo opinar lo mismo de las letras de sus canciones o de la actuación de su frontman, que no me convenció en absoluto y que tuvo, además, un par de desafortunados comentarios.
Era el turno del gran William Bell, que ofreció un concierto soberbio, y fue sin duda junto a los Los Ibéricos lo mejor del día. Lástima que resultara tan incómodo el comportamiento de muchos de los asistentes que tenía a mi alrededor, entre los que se encontraban los componentes del grupo anterior, que no dejaron de hablar durante todo el concierto incomodando a aquellos que habían respetado su concierto horas antes. Algo incomprensible viniendo de músicos. Durante todo el concierto me moví varias veces de sitio en busca de un lugar en el que pudiera escuchar a William Bell y su banda hasta dar con un lugar donde pude disfrutar de él.
Comenzaron con ‘Easy Comin’ Out’, a la que siguieron otras como ‘Any Other Way’, la fantástica ‘The Three of Me’ o ‘Poison in the Well’. También hicieron un cover de ‘Stand by Me’ de Ben E. King. ‘I Will Take Care of You’, emotiva y sincera, hizo que una lágrima se me escapara. Hicieron un repaso de los primeros temas del artista con su primera discográfica, Stax Records, en la que conoció a artistas como Otis Redding, con el que cantó ‘Don’t Miss Your Water’, tema que introdujo a su setlist del sábado en el Slap!. También interpretó otras canciones de Stax, como ‘Everybody Loves a Winner’ y ‘Private Number’ que cantaba junto a Judy Clay, y que esta vez interpretó la corista. Dedica a las mujeres la estupenda ‘I Forgot To Be Your Lover’. Increíbles momentos que nos han brindado Bell y compañía en una hora y media en la que tanto los músicos como el propio Bell se mostraron muy agradecidos.
A esas horas ya nos faltaron fuerzas para quedarnos al concierto de Marta Ren & The Groovelvets, que escuchábamos con pena desde nuestra habitación, y entre su repertorio distinguimos dos versiones de ‘Light My Fire’ de The Doors y del ‘Satisfaction’ de The Rolling Stones.
Nos despertamos pronto el domingo para acudir a la Jam Session que estaba programada pero que finalmente no tuvo lugar, supongo que por falta de voluntarios. Escuchamos desde la piscina el homenaje al 50 aniversario de John Coltrane que ofreció la banda Bang!, y terminamos el festival con la banda Los 300 que, a base de loops, llenó el escenario como si hubiera 300 músicos sobre el mismo.
Además del habitual buen ambiente humano y musical característico de este festival, como recuerdo de esta edición del Slap! nos llevamos varios picotazos de araña y mordeduras de la ya famosa mosca negra, que se ha quedado una temporada por Zaragoza. Y, como la marca dura un año, nos estaremos acordando del Slap! todos los días hasta volver a la próxima edición. ¡Gracias a todos los que hacéis posible el Slap! Festival, sois fenomenales!
Lugar: Camping Municipal Ciudad de Zaragoza (Zaragoza)
Fecha del Evento: 17 y 18 de Junio de 2017
Texto: Zaioa López
Fotografías: Gaizka Narváez
