Nueva visita de los californianos lo cual siempre es una gran noticia. Al pie del cañón y ya van por los cuarenta y cinco años en activo que se dice pronto. Su último trabajo ya lo atestigua con el título de 45. Aunque igual se refieren a los singles a 45 r.p.m. En cualquier caso un trabajo en los que no faltan los pildorazos marca de la casa con sus melodías y juegos de voces que les quedan de maravilla y a los que recurrir para levantar el ánimo y que es mano de santo. Acaban de reeditar los tres primeros discos y es que el paso del tiempo no ha hecho más que acrecentar un material que aguanta el tipo sin problemas y que sigue sonando fresco y potente como el primer día.
Y cuando ves a un grupo disfrutar y agradecido por tocar es difícil que no vaya todo sobre ruedas. Todo el concierto con muy buen rollo entre ellos lo cual lo transmiten al personal y si encima añades unas canciones esplendidas pues todo el mundo con una sonrisa de oreja a oreja.
El concierto es un repaso a esos estilos que tanto les han influenciado. Empiezan en clave Doo-Wop con esos juegos vocales que se marcan vacilando con Metallica para de seguido enganchar “Hit The Nerve” y “Fallin’ In Love” mostrando esa faceta pop que dominan a la perfección. Jon nos anuncia la reedición de sus tres primeros discos y desempolvan “Fireball” del “The Basement Tapes” que se encarga Tommy de cantar. Hay un recuerdo a Ennio Morricone con “El Bueno, El Feo y El Malo” que les queda muy guapa para de seguido su hit inmortal con “I Wanna Be Your Boyfriend“. Más temas para el recuerdo con “Leave My Heart Alone“ y toda una demostración de canción redonda. Cae “Countdown to Love“ del “45” que sube las pulsaciones ya que aunque los temas son muy buenos falta meter el power de una vez. Y este llega con el instrumental en clave surf de “Sting”. Las guitarras ya empiezan a echar chispas. El sonido es más compacto y potente así que “Not Just Another Pretty face” y “Run Mascara Run” se benefician de ello y suenan contundentes. Y la que se lleva la palma es la versión tan macanuda del “Shake Some Action” de los Flaming’. Demoledora. Jon nos dice que seguramente el siguiente tema es la canción que más veces se hace por todos los grupos de california a lo largo del día. Se lanzan a por “Walk Don’t Run” de los Ventures con movimientos coordinados de todo el grupo como dios manda.
En la recta final siguen pisando el acelerador con “Hurts Too Much“ y “Amnesia“ y el power al rojo. La guinda al pastel no podía ser otra que la versión de Tommy James & The Shondells “I Think We’re Alone Now“ que la gente recibe por todo lo alto.
Para los bises es fácil adivinar cuál es la que toca cuando aparece Jon haciendo el ganso el plan guitar-heroe pero sin tocar y a Tommy escondido metiendo los riff’s oportunos para dar comienzo a “Rock And Roll Is Dead” y el turno a la faceta hard-rock que faltaba para completar la noche. Se despiden acordándose de los mejores. El “Shenna is a Punk-Rocker” cierra el concierto adaptándolo a su estilo con esos coros que se marcan y que el Dee Dee hubiese disfrutado de lo lindo.
Grandes. Muy grandes. Y si alguien sigue buscando el elixir de la eterna juventud que se lo pregunten a los Rubinoos.
Lugar: Kafe Antzokia (Bilbao)
Fecha del evento: 21 de enero de 2016
Texto: Antonio Lopez
Fotografías: Lorenzo Pascual
