Después del aplazamiento del mes de Diciembre ya tenemos a Vinila Von Bismark en Bilbao para presentar su nuevo disco “A Place With No Name”. Esta vez sólo a su nombre. Culo inquieto. No está dispuesta a repetir la fórmula del disco anterior que saco acompañada por los Lucky Dados y abre el abanico para abrazar también otros sonidos pero sin olvidarse de su lado rockero que también hay. Sonidos más exóticos, con cierto aire de misterio y algunos que remiten a su Granada natal que le dan más variedad al disco.
Una de la facetas de esta artista es la puesta en escena que no deja indiferente a nadie. La domina de pe a pa. Curtida también en el campo del teatro con la obra “The Hole” lo que ayuda a sentirse como pez en el agua sobre un escenario. La imagen es muy importante y ella la cuida hasta el último detalle. La de pin-up parece que queda atrás ya que esa imagen parece más relaciona con la música años 50 del anterior disco y en último la cosa va por derroteros no tan fifties. Pero bueno, hay están los tatuajes que no dejan indiferente a nadie. De todas formas no sólo es muy fotogénica y también canta a las mil maravillas. Cuando veo la portada de sus discos me viene a la cabeza la peli “Cabaret” y Liza Minnelli aunque Vinila vaya de rubia.
El concierto es en la sala Azkena que presenta una buena entrada con mucha presencia femenina o por lo menos más a lo que estamos acostumbrados.
Primero aparece la banda y para engrasar la maquinaria se marcan un tema instrumental para dar paso a la presentación del guitarrista de la increíble, misteriosa e hipnótica Vinila Von Bismark . Vestida tal Cleopatra empieza con el tema “Snake” y esa atmosfera tan de misterio que produce y que es idónea para la peli de Twin Peak que parece está preparando David Lynch. Vinila nos tiene como hipnotizados con sus movimientos y la música de este tema tan de película. Toca la hora de reaccionar y suena “Teddy B” con ese ritmillo tan contagioso que parece sacado del anuncio de una función de circo para presentar a la lanzadora de cuchillos.
Sigue con la versión de los Latins del tema “Habibi Twist” y ese aire mozárabe a ritmo de twist tan vacilón. Llega el turno del tema que da nombre al disco “A Place With No Name” y que ella define como música envolvente. Ella se sigue marcando su coreografía que hace que no puedas apartar la vista del escenario. Nos deleita con el oriental-rock “Daddy Lolo” que parece sacado de Ali Baba y los 40 ladrones. A una canción en castellano “No No No” muy de guateque le sigue la historia del tío que se encuentra en la Alhambra y que acaba conformando la canción “Ali Baba”, un tema vacilón y con mucho meneo. En “Shooba dooba dooba” invita al jolgorio y a mover las caderas. Se marca un baile más que acrobático mientras el bajo marca la pauta a seguir.
La banda que la acompaña la cubren las espaldas a las mil maravillas para que ella se dedique a hacer lo que mejor sabe que es interpretar y cantar. Ya tiene muchas tablas y se nota que sabe que aparte de ofrecer música hay que entretener al personal y ella tiene la lección bien aprendida.
Con “Yaila” nos traslada a su tierra natal con ese cante que respira aroma Al-Andalus por los cuatro costados. Toma un poco de aire y deja a la banda que se marque un instrumental mientras ella se va al camerino para a la vuelta volver con una imagen acorde con la entrega de canciones que toca. Con “Electrify” invita al bailoteo y a mover el esqueleto de lo lindo. Se acabaron las posturas en plan rollo mozárabe y ahora toca actitud rockera 100 %. Le sigue una de las pocas concesiones al sector más rockabilly con “I Got A Rocket In My pocket”. Tema que sube la temperatura para rematar con “Feel like a man” y ese órgano tan wooly wooly de los Sam The Sham & Pharaohs para que nos pares de moverte y que deja con ganas de más. Nos presenta a sus músicos con unas maneras que ya le gustaría a más de una banda tener una maestra de ceremonias con su gracia y desparpajo.
Para el bis se marca un “Besame mucho” que nos deja con la boca abierta con un baile muy sensual que ni la Saritisima. Le sigue un “The Last of the Secret Agent” muy movidito en el que avisa a las primera filas que no te acerques a su agente secreto por lo que te pueda pasar. Acaba con un poderoso “I’ve got my eyes on you” que hace las delicias del personal paseándose por la sala con mirada desafiante con él respetable.
Vinila va paso a paso y con las ideas claras de sorprendernos en cada entrega por lo que a ver cuál es el siguiente movimiento para el próximo disco. Lo que está claro que en directo el espectáculo está asegurado.
Lugar: Sala Azkena (Bilbao)
Fecha del evento: 07 de febrero de 2015
Texto: Antonio Lopez
Fotografías: David Mars