Este pasado martes tocaba el grupo de post punk Liars en la sala Joy del teatro Madrileño Eslava.
De primeras la elección de un día tan a principio de semana delataba que, muy pocos desconocedores del grupo iban por casualidad a apuntarse al concierto, no obstante la céntrica zona de Madrid, en una sala, donde más de una vez se ha visto algún despistado turista entrar a un concierto con la inicial intención de conocer esa sala que viene en las guías nocturnas de la ciudad donde te puedes encontrar una sesión de música comercial y un ambiente internacional. Pero este no era el caso.
Al llegar a la sala, los que no estábamos al tanto, los presentes fuimos gratamente sorprendidos por la actuación de Der Panther, el grupo elegido como teloneros. Este dúo madrileño, conocido por algunos por su anterior nombre, Calimä, no pasa desapercibido, primero por su actuación dentro de una especie de “caja” cubierta por telones blancos donde lo único que puedes apreciar es su sombra y su elaborada y sofisticada música electrónica. Al parecer, es su filosofía como músicos, donde no importa quien produce el sonido, sino como y de qué forma llega a la gente, y personalmente creo que lo consiguen.
Con extraña puntualidad pisaban el escenario ya libre de cajas y telones unos llamativos componentes de Liars, por su ropa excéntrica y de colores fosforitos, y por el golpe de sub graves que acompañaba su aparición, empezaron pisando fuerte.
Acto seguido una joya del último Album “Mess”, Pro Anti Anti, rompía el silencio llenando sala de un sonido y ambiente muy oscuro, un tema muy industrial, con toques EBM que te trasladaba de un “bofetón” a los ochenta, sorprendiendo a algunos presentes que manifestaban ganas festivas, que quedaron atónitos por el comienzo muy poco alegre. En mi opinión una acertadísima elección.
El espectáculo siguió con otro tema este último Álbum lanzado, Mask Maker, algo menos oscuro, pero con ritmos contundentes que hacían vibrar las cajas torácicas de los que estábamos con nuestras cámaras en primera filas y una voz que hasta podía recordar a Rob Zombie incluso el tema mismo, cualquiera del último disco de White Zombie, con sonido más modernos y rebuscados, eso sí.
La siguiente elección se saltaba con los pies juntos cuatro años atrás del tirón, con el disco Sisterworld, interpretando una más melancólica y perturbadora No Barrier Fun dejándose por un momento los ritmos electrónicos atrás, un curioso “parón” antes de volver a la caña con otro tema del último disco : Vox Tuned D.E.D. Era el momento para el público de balancear las cabezas y levantar las manos, hasta los bailes desenfrenados de los más atrevidos, no era momento para cortarse, las ondas electrónicas vibraban por toda la sala infundiendo una sensación de improviso frenesí dictado por los ortopédicos movimientos de brazos y manos de Angus y su suelta y sudada melena que en ningún momento dejaba casi ni percibir los rasgos de su cara y las caras delirantes que le poseían por momentos.
Así entrabamos en la parte central de concierto, empujados literalmente por el público y por las canciones WIXIW de homónimo álbum y I’m No Gold, fue sin duda el momento álgido del espectáculo donde la entrega era máxima y total, cerrándolo muy acertadamente con Can´t hear Well del último álbum.
Siguieron unos temas más instrumentales algo más místicos hasta unas pegadizas Mess On A Mission y Brats que volvieron a levantar el entusiasmo de los presentes.
Está claro que Liars, son de esos grupos, que de forma innata o estudiada, saben cómo organizar los tiempos y mantener la atención del público, sin llegar a aburrirlos con un sinfín de temas.
El concierto se cerró más que dignamente con tres encore : Beach (Be Quiet Mt. Heart Attack) , Plaster Casts of Everything y Broken Witch, sin dejarse convencer por típicos gritos del públicos en trance pidiendo más.
Mi opinión unos de los grupos más contemporáneos de electrónica y dance punk con más talento ha salido aún más reforzada después de este directo. Si no les conoces siquiera, no tienes perdón.
Lugar: Joy Eslava (Madrid)
Fecha del evento: 28 de octubre de 2014
Texto: Deruting