Segundo día del Azkena Rock Festival. A priori el día fuerte. Y se nota. La asistencia de público ha crecido mucho.
Empezamos con Bala. A pesar de ser el primer grupo del día acude más gente de lo que suele pasar a estas horas. El dúo no tiene tiempo que perder y ya nos anuncian que poca chachara y al lio. Nos ofrecen un concierto poderoso y nos quitan la pereza en un plis plas. Ese sonido grunge de la guitarra de Ánxela Baltar y su forma de cantar que parece que viene del averno junto a la pegada de Violeta Mosquera a la batería forman un bloque sólido para desatar una tormenta sónica que no deja indiferente a nadie. Presentan “Bestas” y poco a poco se van haciendo un hueco en el panorama musical. Empiezan con la macanuda “Equivocarme” de su último trabajo y ya te dan un buen subidón. Hay están “Agitar”, “Colmillos”, “Tripas / Chained”, “Omertá”, “Una Selva” ó “Verde”que son una bofetada continua. “Bessie“, la historia de la chica motera afroamericana que en su época le callo la del pulpo. “Run Free Bessie Run Free” nos atiza de lo lindo. Se une al dúo la bajista de los Nashville Pussy que andan de gira por la península y se hacen “Hoy no“, “Territorial Pissings“ de Nirvana y “Agitar“. Siempre es bienvenido más instrumentación. En la recta final “Inmutable“, la brutalidad de “Quieres entrar“ y “Humo”. Se han apresurado tanto que les da tiempo para otro tema y despedirse. Pues eso, menos chachara y al lio que cunde más.
Nos vamos al Trashville a ver a Ghalia Volt que no conozco pero me lo han recomendado al empezar la jornada. Y después de lo visto hay que poner remedio rápidamente a ese desconocimiento. Ella es una “One Woman Band” que se encarga de la voz, guitarra y percusión. Se defiende en castellano muy bien. Creo que nos dice que su madre es española pero que ella es una giri. Nos ofrece blues y rock en su punto y sin adulterar. Resultando un concierto excitante, divertido y rockerizante. Y cuando se hace con la slide resulta matadora. Joder con el pato borracho. No vuelve. Devuelve del pedo que lleva. Hay lanzamiento de petaca al personal. Infalible es “Shake Your Money Maker“ de Elmore James a la salud de George Thorogood. Nos hace cantar y disfrutar de lo lindo.
Sin perder tiempo nos vamos al escenario “God” a ver a Barry Adamson. Le da un buen repaso a su último trabajo “Cut To Black”. Viene en formato trio pero se ayuda de sonidos pregrabados y una pequeña Tablet o algo parecido que usa de teclado. Nos da un concierto muy chulo que igual en un garito hubiese sido el sitio ideal. El empiece con “These Would Be Blues” ya nos tiene cautivados. Nos pregunta si el blues tiene sitio en un festival rock. Que buena “Sundown County” con versión de “Hot Love” de T. Rex incluida. Imposible no caer rendido a “One Last Midnight“. Ya le tenemos cantando a pie de escenario. “Straight ’til Sunrise“ pide chasqueo de dedos y dejarse llevar y disfrutar. “Manhattan Satin“ se la dedica a la memoria del saxofonista James Chance. Con “Civilization” baila o muere chaval. Se despide con “Jazz Devil” dejándonos encantados.
Elegimos a Redd Kross. Se solapa con Rain Parade que no he visto nunca pero apostamos por carta ganadora. Estas en un festival durante mucho tiempo y un bajón puede ser un desastre. Y hay tenemos a Jeff y Steve McDonald junto a su compañeros vestidos como si les hubiese caído unos cubos de pintura encima. Hay que pasárselo bien y ellos tienen la receta perfecta. Y que mejor para elevar el ánimo a tope enlazando “Switchblade Sister”, “Stay Away From Downtown” y “Stunt Queen”. Menudo subidón. La banda está encantada y se nota. La selección de temas es toda una celebración continua así que el público responde encantado. Toca disfrutar de “Uglier”, “Pretty Please Me”, “Annie’s Gone” y “Mess Around” en otra tanda insuperable. Pero queremos más y ellos saben dar en el clavo. Que me dices de la gozada de “Jimmy’s Fantasy”, “Lady in the Front Row” y de remate “Huge Wonder“. “Phaseshifter” en lo más alto. Ponen la guinda con “Peach Kelli Pop” y retroceden muy atrás con “Born Innocent” y “Linda Blair”. Nunca fallan.
Las L7 es la siguiente parada. Se anuncia el concierto de celebración de su álbum “Bricks Are Heavy”. Yo preferiría “Smell The Magic”. El tiempo no pasa en balde pero nos dan un concierto digno. Las canciones siguen funcionando y ellas las defienden con buena nota. Hacen el repaso del disco en cuestión y también una selección de toda su carrera. De ese disco claro está me quedo con “Everglade”, “Pretend We’re Dead” y “One More Thing”. Mano de santo. Pero tienen más canciones. “Fuel My Fire” levanta un muerto, “Stadium West” mola que no veas pero nada comparado al pepinazo de “Shove” y el cierre perfecto con “Fast and Frightening”.
Me dicen de acercarnos un rato a Arde Bogotá. No les he oído nunca pero sé que les acaban de dar muchos premios. Igual me estoy perdiendo algo. Un rato me dice lo que ya presuponía. No es lo mío. Eso sí, me he quedado con la cara de muchos y se les quitará seis puntos del carnet de rockero de pro.
Vamos rapidito para el escenario Gold que nos espera el bolo deseado del festival. Los Black Halos tocando enterito su álbum “The Violent Years”. Un disco que he oído un millón de veces. En la otra gira se anunció también de la misma manera pero no le tocaron entero. Pero esta vez si!!!. Se lo hacen todito y en orden de cómo están las canciones en el disco. Un sueño. Porque ese disco se codea con el “Never MInd The Bollocks”, el primero de los Clash, Damned, Slaughter and The Dogs, etc etc. Pero todo no puede ser perfecto y el sonido nos es el mejor precisamente. La guitarra de Rich Jones suena baja. Bueno y la de su compañero. Joder, que es un concierto de rock and roll. Pero bueno, nada me va a chafar este momento. Disfruto cada tema. No sé el resto del público pero yo estoy en la gloria. Nada puede superar el empiece con “Some Things Never Fall“ y “No Tomorrow Girls“. A priori no sabes que lo van a tocar entero pero según avanza el bolo se ve que sí. A Billy Hopeless le veo más saludable que la otra vez. Y no es que haya dejado la farra porque se comenta que ya llevaban unos días antes dándolo todo. Mi favorita “Lost in the 90’s“ es todo un placer. Que subidón. Pero qué decir de “Sell-Out Love“, “Start the Violence“ ó “No Class Reunion“ en las que te dejas la garganta. El resto más de mismo. Quieres que le vuelvan a dar la vuelta al disco y empezar de nuevo. Caen “Better Days“ y “Three Sheets to the Wind“ que son dinamita. La sorpresa viene cuando aparece en el escenario Michael Monroe. Se hacen “Ready To Snap“ que es la canción en la que colabora en su último disco. Al tío le da igual donde este que es un huracán. Y para acabar también con Michael “3rd Generation Nation“ de los Dead Boys. Se ha pasado en un suspiro. Esperemos verles pronto.
A por los Queens Of The Stone Age. A priori el bolo al que ha venido todo el mundo. Cuando llegamos ya ha empezado. La cosa va bien con “Smooth Sailing“ y sobre todo “Paper Machete“ que pone las pilas a cualquiera. Se disfruta “I Sat by the Ocean”, “Emotion Sickness” saca las palmas pero muy justitas. La selección de temas está bien pero tampoco consiguen un entusiasmo en la parroquia que ponga Medizabala patas arriba. Se escuchan y estas a gusto. “Go With the Flow” y “The Lost Art of Keeping a Secret” con el sonido de ese escenario te llevan a otra dimensión. Con “Burn the Witch” la gente si responde a los “ahhhh ohhhh” que pide la canción. Es que si no estarían muertos. En “Straight Jacket Fitting” Josh Homme se baja del escenario a cantar cerca del público y vacilar un rato con los “ohhhhs”. Con “Make It Wit Chu” si hay buena sintonía con el público que canta el tema. Se hacen un cameo con el “Emotional Rescue”. Acaban con “No One Knows” que saca las palmas al ritmo que marca el bajo y “A Song for the Dead” con sólo de batería incluido. Me han convencido.
Los Demolition 23 ya se habían juntado previamente para la fiesta de celebración del porrón de años que lleva Michael Monroe dando lo todo. El Azkena aprovecha y se los trae. Y es que a Michael Monroe hay que nombrarle hijo predilecto de este festival. Ya vino con los Hanoi Rocks, con la banda a su nombre y ahora los Demolition 23. No quedan más escusas para traerle. Algo habrá que hacer. Porque un concierto de este tío a última hora es lo que te pide el cuerpo. Y el concierto es a caballo ganador. Tocar el disco de los susudichos y luego una selección de temas de bandas emblemáticas y que conoce todo cristo. Pero otra vez el sonido no está a la altura. Y encima que viene con sólo una guitarra pues poca chica. Pero lo que ya hemos comentado antes. Las canciones del disco de los Demolition 23 pueden con todo. La gente entregada, cantando y apoyando a Michael cada vez que se baja del escenario. El tío no para y esta abajo, tirándose por el suelo ó subiéndose a los andamios. Y es que se le ve en forma. Este sí que ha hecho un pacto con el diablo. Y ya en los primeros temas casi se toca todo el disco. Empiece de locos con “Nothin’s Alright“ y “Endangered Species“. Irresistible. Vamos para delante. Siguen con “Scum Lives On “, “Same Shit Different Day“ con toda la gente apoyando y cantando la canción y “Dysfunctional“. Luego una buena tanda de versiones. Selección de los Dead Boy. “Ain’t It Fun” le queda muy guapa con el sonido de la armónica. De los Damned con “Love Song“ y “Machine Gun Etiquette“. No faltan los Hanoy Rocks y el puto jefe Iggy Pop y sus The Stooges. Pero la que queremos oír es “Hammersmith Palais” que nos dejamos la garganta. Grande Michael.
Lugar: Mendizabala (Gazteiz)
Fecha del Evento: 21 de Junio de 2024
Texto: Antonio López
Fotografías: David Mars